EL GRAN PASTELEO.

¿Está la sociedad española preparada para los cambios o quien no lo está son los políticos?

Sin duda estamos ante la gran pregunta.

Si atendemos a los resultados electorales habidos el 20D del año pasado la conclusión es obvia: en España hay dos Españas.

Si sumamos los votos de la derecha española. Pp, Ciudadanos, Pnv y lo que antes era Convergencia y Unió (en este último caso hay que hacer una estimación que yo hago de forma salomónica y atribuyo la mitad a ERC y la otra a Convergencia), la cifra que se alcanza es aproximadamente( más, menos) de once millones doscientas cincuenta mil personas.

Por el contrario si sumamos los votos de Psoe, Podemos, Erc y Bildu se alcanzaría, casi exactamente, quizá un poco por encima, el mismo número de votos.

Estaríamos ante un empate técnico.

Sin embargo gracias a la famosa a Ley d`Hondt, la Ley Electoral actual, el reparto de escaños, debido a la proporcionalidad, se ve alterado a la hora de trasladar el resultado al número de diputados.

Si en España tuviéramos otra Ley Electoral en las pasadas elecciones la izquierda no sólo habría ganado en votos, como así fue, sino que también tendría más diputados en el parlamento.

Es un hecho. Y, recuerdo a los escépticos, que los hechos no se discuten.

Pero no, en España cuando los políticos inauguraron la Democracia tutelada que diseñó alguien en Estados Unidos, optaron por el sistema d`Hondt porque así se garantizaban que siempre ganarían las elecciones los partidos estatales.

La Ley d`honndt, la inventó un belga de profesión matemático y jurista en el siglo XIX y se aplica en países como Francia, Finlandia, Argentina, Chile y Ecuador.

A mí juicio es una ley obsoleta y trasnochada porque pervierte la auténtica democracia al hacer que un voto tenga más importancia que otro, y por dar por hecho, y cierto, que un territorio es más importante que otro por la simple razón de estar más poblado. La suma de estos dos factores altera el producto y da un resultado injusto.

Los partidos políticos más votados, Pp y Psoe, ni se plantean cambiar la Ley Electoral. ¿Por qué? Porque ellos serían los más perjudicados, y para cambiar algo de este calibre e ir a una democracia realmente representativa tendrían que llegar a un acuerdo prácticamente unánime.

Por tanto estamos condenados a soportar interminables pasteleos, y las cosas realmente importantes tendrán que seguir esperando porque los señoritos/as están tocándose los bemoles, cobrando sueldos y chupando del bote, ocupados siempre en hacer política de la señorita Pepis.