LOS CHINOS Y LAS PAJAS.

Todo el mundo habla de los pueblos que son graciosos. Aquí en España  los andaluces se llevan la palma. Quizá, sí. Quizá, no. Depende,  va con los gustos y como cada cual tiene el suyo es difícil solventar el tema. Bueno, qué más da. También se cacarea mucho lo del humor inglés. Bueno, la mayoría de la gente no tiene ni zorra idea de inglés pero al parecer entiende el famoso humor inglés. Raro si que parece, pero como hay gustos y como somos demócratas. Allá cada cual con sus manías. Sin embargo, a mí, claro es una opinión muy particular, o sea mía, me gusta el humor de los chinos. Sí, lo aprecio mucho, y no discutan. Acuérdense de que hay gustos, de que cada cual tiene el suyo y de que somos demócratas por parte de Franco. O sea, que ya vamos ganando algo. El caso es que andando como ando en desocupaciones varias leo que los chinos, los de la China, los de aquí, no; tienen un banco de semen por provincia. Debe de ser el Banco de Semen Provincial, o sea, como una Diputación pero en plan, oye, nos hacemos unas pajitas. Vas al banco te dan una participación preferente y no estafan a nadie. No es un cuento chino, ni necesitan naranjas de la china para reponer. Se lo montan así. Pero como tienen humor y son algo raritos, el que lleva la estadística de las diputaciones de semen chinas se dio cuenta de que había poco tema. ¿Qué pasa? Hicieron un examen control para encontrar el fallo. Pornografía china, vídeos, revistas… lo habitual. Sin embargo, faltaba la motivación. El régimen chino que es muy serio, muy adusto y del que en Europa dicen que es una dictadura, aunque después todos se pongan a la cola de las felaciones, dijo que aquello no podía ser. En China somos serios y si nos hacemos una paja tiene que ser con fundamento, sino es vicio. Eso dicen que dijo la autoridad competente en el tema. Desesperados acudieron a I+D+I que no tengo ni idea de qué puede ser, pero queda bien ponerlo, y encontraron a toda una pléyade de científicos chinos dispuestos a remediar la situación. Así fue como nació, perdón, inventaron la máquina de hacer pajas. La ordeñadora humana. Dicho y hecho. Se hizo un decreto, para variar, y pusieron en cada diputación de semen una máquina. Más tarde hicieron ampliaciones porque se dieron con cuenta de que a los chinos les gusta el despendole colectivo y gesticulante. Introducen allí la cosa, el colibrí o lo que sea que tengan los chinos entre las piernas, para mí, que polla, pero a lo mejor es un maldecir; y se dieron cuenta de que la efectividad no sólo mejoraba exponencialmente, que debe ser una manera de decir de forma alambicada que se corrían que daba gusto, ver a esos colibrís aleteando amor furioso. La sala del ordeño mecánico está superpoblada de chinos. Mientras la sala “la due mani”, “la tutto orquestra”, “La duo dedini”, “la capullini”, “La mosqui”, “El calcetín” y otras se han quedado desiertas. O sea, un devenir para otros tiempos. Ahora lo que se lleva no es hacerse un táctil. Están obsoletos. Modernízate, Homigos. Ahora lo que es trendig topic, en cuestión de pajas, al menos en la China, es hacerse un “sin manos”

Y les aseguro que no es ningún cuento chino, te voy a regalar…

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